Sin Palabras
He reposado el sollozo de mí recién nacida en mis brazos
Hice de su sueño indefenso mi calor
A tu olvido arrancando soledades,
Deteniendo la absurda imagén del ayer.
La noche intranquila mece la cuna
Yo me acomodo al lado de ella
Para brindarle mi calor
Y hago de tu sonrisa
Una promesa de ensueño
Como antes amor
Dándole un beso en la frente
Para que algún día escuche tu voz
Ella,...
Nuestra niña
En su idioma
Consulta extrañando
Con su mirada irradiante a través del cristal
Busca tu silbo colosal a medio día, a media noche
Te busca por las calles que nos quieren devorar
Pero su vista no alcanza tocar tu sombra gigantesca
He contado las horas y también las penas
Los escasos segundos de tu ausencia
Ella aprieta mi cuello e inclinándose con sus vértebras pequeñas
Voltea a mi oído susurrándome un lamento
Espera la noche siguiente
Para que tal vez llegues pronto, sobrio, amoroso y tierno
Y apretar con sus dedos diminutos tu corazón
Y así devolverte pronto el amor.
Yo y ella, hemos llorado tanto
Hemos llorado juntos
Ella consolándome por tu adiós
Yo protegiéndole hasta que vea tus ojos de sol.
Ella desea volar en tus brazos
Elevarse encima de tu frente
Danzando en el aire perfumado
Y ser tu ángel que te guarda.
Vuelve pronto
Cruzando cerros
Cruzando mares
Vuelve pronto
Sin mirar atrás
Porque aquí te queremos...
Te Amamos los dos.
Cori y Mirian.
Cajamarca, 10 de julio del 2007.
Con Sollosos...
© Moshenga Cabanillas Pérez, 2007